Cartas del INC enviadas de oficio para salvar la responsabilidad del Estado (pero como se verá más adelante terminaron avalando actos de corrupción)

Carta enviada por la Lic. Ana María Hoyle Montalva, funcionaria del INC, preguntando a CMR Falabella (un nudo de empresas donde también esta Ripley, Tottus-Sodimac, con todas sus ramificaciones, etc) si tiene la licencia de construcción lo que implicaba haber conseguido de antemano el Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos (en adelante CIRA). Esto demuestra que en esa fecha los dueños de todo este megaproyecto no contaban con nada, no tenían licencia para ni para demoler, ni para construir, no tenían habilitación urbana, no tenían CIRA (eso es una historia aparte...), no tenían estudio de impacto ambiental, no tenían nada; y las autoridades encargadas de fiscalizarlos tenían menos, ni siquiera conocían sus funciones en materia de cultura según la Nueva Ley Orgánica de Municipalidades, menos las autoridades y funcionarios en materia de cultura pertinentes.

Egocéntrico como él solo, el Alcalde Heresi piensa tal vez que "política cultural" es mantener una Casa de la Cultura u organizar el concierto que recuerda la muerte de J. Lenon para poder tocar él mismo al lado de grupos que no les queda de otra que aceptar su "performance", o depredar la pérgola del parquecito que está frente al Malecón Bertoloto como lo hizo con hace algunos años, cuya "restauración" no cumplió con los requisitos del caso, claro, al cabo esa pérgola ya no era un símbolo para el distrito, ya no era el isotipo del logo del municipio de San Miguel que fue cambiado por un mamarracho de logotipo muy a la medida del alcaldísimo sin cumplir la normatividad del caso prescrita para con los monumentos de la Nación, tan a la medida que el logotipo actual del municipio se parece al símbolo de campaña con que él se postuló como Alcalde.

Ahora se entiende la esquizofrenia del Alcalde Heresi cuando planta con desparpajo y absoluta ignorancia supina ese inmenso cartel publicitario como lo hizo hace unos pocos años (el 2005 o 2006) que dice: "Con el respeto de los sanmiguelinos de hace 700 años..." (Sic.) Pobre, no sabe que el periodo en que floreció la cultura Maranga y el complejo arquitectónico de Watika Marka fue mucho tiempo más atrás que 700 años (parte del complejo arqueológico, la huaca Watika Marka o Huantinamarca, quedó dentro de los terrenos de la ex Feria del Pácífico propiedad de la familia Lettersen; exacto, los padres del desaparecido escultor de apellido Lettersen quienes son los responsables de la depredación última del otro montículo arqueológico aledaño a Huantinamarca como lo relata el Boletín N° 8 colgado atrás, en un terreno que finalmente forma parte del megaproyecto comercial Tottus Sodimac y que al igual que en Pantanos de Villa, se construyó de manera ilegal como lo hemos demostrado a las autoridades y funcionarios corruptos sin haber logrado hacernos oir como sucedería si estuviéramos en una democracia con Estado de Derecho. Si no fue a eso a lo que se refería con el aviso inmenso plantado en la esquina de la Av. Brígida Redondo y la Av. La Marina donde está Tottus-Sodimac, peor aún, porque se pueden pasar por alto los fechamientos arqueológicos y preguntarse ¿y por qué no con el respeto de los "sanmiguelinos", es decir de los antiguos habitantes de la cultura Maranga de hace miles de años, y más aún con el respeto de los vecinos de ahora?

Peor aún, tenían autoridades lacayos o más bien felipillos que los apoyaron a depredar nuestro patrimonio como se sigue haciendo hasta ahora y que algún día tendrán que dar cuentas por el daño al patrimonio nacional.

Carta enviada por la Lic. Ana María Hoyle Montalva, preguntando al Alcalde Salvador Heresi si la inmoviliaria Kainos contaba con los permisos correspondientes (que como sabemos no existían)